Pandemias. Cuarentenas. Bloqueos. No ha habido un mejor momento a lo largo de la historia moderna en el que uno podría reimaginar el significado de la arquitectura y lo que puede representar. Con las personas confinadas en espacios pequeños, el mundo ha innovado colectivamente nuevas formas de hacer esos espacios más grandes, ya que el confinamiento dentro de los límites arquitectónicos estrictos ya no es suficiente para contener todas las actividades de nuestras vidas. Con los exteriores fuera de los límites y los interiores insuficientes para satisfacer nuestras diferentes necesidades, ¿qué pasa con el destino de las reuniones sociales?
Como hemos visto, la humanidad no ha renunciado a su deseo de albergar estas reuniones sociales, sino que se ha vuelto hacia los ciberespacios para reunirse colectivamente. Desde un aumento exponencial en el uso de servicios de videollamadas hasta un aumento en las transmisiones en vivo colaborativas y las actividades de entrenamiento en línea, la pandemia de COVID-19 ha demostrado que los espacios muy pequeños y confinados son suficientes para albergar todo un mundo de experiencias.
Sin embargo, tal vez ningún ejemplo podría resaltar mejor el papel del arquitecto (o diseñador) que el Evento Astronómico Fortnite de Travis Scott, un concierto en línea con miles de asistentes alojado dentro de uno de los videojuegos más populares del mundo, todo mientras empuja los límites arquitectónicos y espaciales. Si bien la idea no es la primera de su tipo, este evento en particular ha superado los límites que uno podría alcanzar en la integración del diseño espacial para crear una experiencia social auténtica, virtual e inmersiva.
Lo que ofrece esta experiencia es un espacio virtual en evolución que se transforma en un lapso de 10 minutos para involucrar virtualmente a los usuarios con su entorno espacial, jugando con las nociones de escala humana, volúmenes, colores y velocidad, todo mientras se reproduce la música del concierto. Al igual que ocurre con el uso de las redes sociales desde la comodidad del sofá de su hogar, es extremadamente fácil sentirse inmerso en estos paisajes virtuales y olvidar por completo su visión periférica. Las posibilidades son innumerables.
A medida que nos acercamos a una era de urbanismo masivo y apartamentos cada vez más confinados dentro de nuestras ciudades, los arquitectos continúan innovando métodos para aumentar el espacio perceptible de un área que de otro modo sería pequeña, recurriendo a métodos como ilusiones ópticas o combinaciones de colores que promueven el bienestar. Sin embargo, con el gran aumento observado recientemente en las reuniones sociales virtuales, ya es hora de que los arquitectos se tomen en serio este medio. Como hemos visto, ofrece un escape sorprendentemente genial para las personas confinadas en sus diminutas habitaciones.
